Friday, February 22, 2008

84 días y un nuevo régimen de vida

Queridos amigos, si cuento bien, han pasado 84 días desde mi última entrada. Con solo cuatro días mas de lo que le llevó a Julio Verne dar la vuelta a su mundo, yo he dado vuelta el mío. No digo que he dado la vuelta al mundo, digo que he dado vuelta mi mundo, como se da vuelta una media…

Jubilación; dolor de espalda; un dedo con artritis; un par de escapadas románticas; descuentos en las entradas al cine; las pastillas de todos los días; el comando de “no hagas fuerza papá”; una casa demasiado grande; anteojos bifocales; un nuevo apodo--“Lolo”--acuñado por mi nieto Eric… etc., etc., y un camino abierto para hacer lo que venga en ganas…

Mis amigos, todo se puede. Y si en algún momento les asalta la idea que no se puede por que faltan algunas piezas..., miren otra vez este video que les adjunto.

Un abrazo a todos.

Alberto

2 comments:

Anonymous said...

la autocomplacencia es buena...pero no te parece como mucho? a los 69 ...no vendria bien un mea culpa?....digo...
pb ... o sea... planta baja

Albert said...

Mea Culpa

¡Touché! Es verdad Anónimo, la autocomplacencia a los 69 es una indulgencia pocas veces merecida; menos merecida todavía si uno nunca se ha dejado flagelar por las propias culpas calladas.

Pero generalmente, los “mea culpa” son menos visibles que las “autocomplacencias”. Uno piensa y actúa en tres niveles: el social, el familiar, y el íntimo, cada uno regido por sus propias normas, imponiendo limitaciones sobre el contenido y la forma de lo que expresamos.

Los “mea culpa” pertenecen al último nivel, el íntimo. Un nivel profundo y oscuro, a donde llega solamente nuestra conciencia solitaria, donde ni siquiera con la almohada es permitido hablar en vos alta… Allí están mis “mea culpas”.

Quisiera comentar sobre “pb ... o sea... planta baja”, pero no tengo idea de lo que se trata… ¿Lo explicas?

Cordialmente,
Alberto